Alojamiento a cambio de servicios: vivir con una persona mayor

De cara al aumento de los alquileres y dentro del contexto de la crisis del alquiler, algunos propietarios proponen alojamientos en el que el precio del mismo es a cambio de servicios. Esta nueva forma de alquiler permite alojarse por menos dinero y ambas partes, propietarios e inquilinos, salen ganando. Vuelta a esta nueva tendencia.

El propietario de un alojamiento puede decidir pagar solamente una parte del alquiler y el resto pagarlo con actividades cotidianas como cuidar a niños, ayuda con los deberes, limpieza, hacer la comida así como la ayuda a las personas con discapacidad o personas mayores. A cambio, el inquilino se beneficia de su propia habitación así como de su espacio personal. En algunas ciudades en las que los alojamientos son muy caros, como Barcelona, París o Londres, esta práctica ha aumentado en los últimos años. El inquilino puede así mismo recibir una cantidad de dinero o dinero de bolsillo, si la carga de trabajo el importante.

Aunque esta actividad es totalmente legal, siempre es recomendable establecer un contrato de trabajo entre las dos partes en el que se establezcan los derechos y deberes de cada uno, y la fecha de comienzo y fin de la actividad. Así mismo es recomendable establecer las normas de convivencia, los espacios comunes en el alojamiento y el tiempo de trabajo para el inquilino. Todo debe de ser precisado.

El alojamiento a cambio de servicios es una excelente solución para los estudiantes, que pueden así alojarse durante sus estudios sin gastar grandes cantidades de dinero.

Este tipo de servicios está fuertemente desarrollado entre los estudiantes inquilinos y propietarios mayores, y está englobado dentro del principio universal de la solidaridad intergeneracional. En efecto, muchas personas mayores disponen de un apartamento o de un alojamiento más grande de lo que necesitan, una vez sus hijos se han marchado de la casa. A menudo una habitación o dos, se quedan libres.

Por ello, estas personas mayores proponen sus habitaciones libres, principalmente para estudiantes, a cambio de servicios adicionales como hacer la comida, la limpieza o simplemente para pasear. La idea es crear lazos entre dos generaciones, para salir algunas tardes y evitar así la soledad y aprender por parte de los jóvenes las historias de vida y el respeto entre generaciones.

El alojameinto a cambio de servicios con una persona mayor es, por lo tanto, una excelente solución para los estudiantes y para aquellos que necesitan encontrar un alojamiento dentro de sus posibilidades. Además permite crear lazos sociales entre personas mayores y jóvenes, que serán más o menos duraderas según las experiencias de cada uno.