Consejos para compartir piso en pareja
Compartir piso con tu pareja suele suponer un gran cambio en la relación. Esto se debe a que la convivencia siempre nos hace descubrir cosas nuevas de la persona con la que compartimos nuestro hogar. En el caso de tu pareja puede que descubras hábitos suyos que no te agradan y que ello genere a veces situaciones de desacuerdo que pueden terminar en disputas. Sin embargo estas situaciones pueden evitarse siguiendo los consejos que te proporcionamos a continuación, que os ayudarán a encontrar el equilibrio.
Estar dispuesto a ceder
A veces, por mucho que nos guste tener la razón, ceder y reconocer que no la tenemos, puede proporcionarnos una retribución aun mayor. El hacer un esfuerzo extra y reconocer los propios errores puede resultar algo duro, pero precisamente por eso tu pareja sabrá apreciarlo y ver tu voluntad de que vuestra convivencia funcione. No solo conseguirás que tu pareja valore tu esfuerzo sino que además demostrarás una gran madurez al hacerlo, lo cual te creará una gran satisfacción personal.
Priorizar el respeto
Este es un elemento clave no solo para la buena convivencia sino también para que una relación sea duradera y estable. Al compartir piso, intenta respetar siempre las costumbres de tu pareja, en la medida de lo posible, ya que es la mejor manera de evitar confrontaciones. Evita ante todo los gritos o las descalificaciones ya que desgastan la relación y hacen complicadas las reconciliaciones.
Mantener una buena comunicación
La comunicación también es imprescindible, pues favorece el entendimiento mutuo y el respeto. Procura hablar de buenas formas sobre los hábitos de tu pareja que te resulten molestos o sobre vuestros problemas de convivencia. De esta forma, conseguirás que tu pareja te respete por la calma con la que estás tratando la situación y además, probablemente, conseguirás que reflexione y quiera esforzarse por mejorar la situación
Repartir las tareas
Al compartir piso, crear una repartición de tareas es siempre la manera de evitar discusiones sobre quién se ocupa más de la casa. Intenta que sea una distribución justa y si existe alguna tarea en particular que ni tu pareja ni tú queréis hacer, procurad hacerla juntos. Otra opción sería establecer turnos a la hora de hacerla. Esto crea una dinámica y un equilibrio justo. Intenta motivar a tu pareja para cumplir con lo que habéis fijado.
Intenta ponerte en el lugar del otro
Es muy probable que, a veces tu pareja no se porte de manera justa contigo por factores externos que no son tu culpa. Por ejemplo, si ha tenido un mal día en el trabajo, es muy fácil que muestre una actitud irritable y susceptible. Intenta ser consciente de que no se siente bien, en general, por motivos que no tienen que ver contigo y en lugar de pensar en la injusticia de que pague su malestar contigo, opta por la empatía. Ponte en su lugar y reflexiona sobre cómo te sentirías tú.
Hacer cosas que os gusten juntos
El compartir aficiones o hacer actividades juntos es siempre agradable. Nunca caigas en la rutina y no dejes de proponer algo divertido que hacer a tu pareja. Esto puede ser algo simple como salir a cenar juntos después del trabajo o pasar un fin de semana fuera. Resulta esencial el mantener la ilusión por pasar un buen rato juntos, aunque os veáis siempre en casa.