Propietarios: qué preguntas puedes hacerle a tu inquilino
Elegir a un inquilino no es tarea fácil. Como propietario, es preciso evaluar, muchas en veces en pocos minutos, si la persona que se postula para ser tu futuro inquilino te inspira confianza. Para asegurarte, puedes hacer preguntas a tu inquilino para intentar conocerle mejor y saber si es la persona ideal para ocupar el alojamiento. Este artículo te guiará en materia de preguntas: las que puedes hacer y las que no son convenientes.
Los propietarios pueden hacer algunas preguntas a sus potenciales inquilinosUn propietario está en su derecho de evaluar el riesgo de que un inquilino se convierta en un mal pagador y de hacer preguntas relacionadas con su situación económica, siempre que estas no sobrepasen los límites de la vida privada del inquilino. Por ejemplo, es normal querer conocer el sueldo o el nombre de la empresa en la que trabaja el inquilino, así como cuanta gente vivirá en el piso, si es fumador o si tiene mascotas. También es recomendable en algunos casos, pedir referencias o información de contacto para asegurarse de la fiabilidad de su palabra.
Sin embargo, hay otras preguntas que se deben evitarDebes evitar hacer preguntas que puedan atentar contra el derecho a la libertad del inquilino. Desecha preguntas sobre sus proyectos en tema de maternidad, origen racial, preferencias religiosas u orientación sexual. Este tipo de información pertenece a la vida privada de la persona y no es de la incumbencia del propietario en ningún caso. No es recomendable ni necesario tampoco pedirle el número de la seguridad social o preguntarle por su estado civil.
Para poder construir una relación de confianza desde el principio y evitar cometer errores de convivencia, evita hacer preguntar innecesarias. Las preguntas privadas pueden ser un paso más en la relación con tu inquilino en el futuro.
Autor del artículo: Roomlala